Claramunt (Lleida)


Un nido de águilas es este enriscado pueblo de Claramunt encaramado en una colina a más de 1.000 metros de altitud, al azote de todos los vientos, con un clima bastante frío.
Como su nombre en latín indica (Claro Monte), está situado en un terreno pelado, con poca vegetación.

Barranc de La Vileta
Barranc de Les Tarteres
Camps de Dalt
Collada del Casò
Els Forats
Els Joferies
Els Grèvols
Els Morrals
Els Perdigots
Els Prats
Font de l´Escolà
Font de l´Hort
Font de la Teixeta
Font del Pou
Font del Pradet
La Tassola
Les Planes
Lo Roure Sol
Lo Serrat Roy
Lo Tancat
Obac de La Vileta
Puny del Moro
Serrat del Trencs

**Son algunos topónimos de lugares comunes de Claramunt que quedaran para siempre en el recuerdo de las gentes que habitaron el pueblo**


Claramunt constaba de seis viviendas, formando una pequeña calle de entrada y dos pequeñas plazas, además de haber seis masías dispersas en su término municipal.
Tenían muchos problemas de abastecimiento de agua, pues tenían que ir a buscarla con el macho a una balsa situada a 20 minutos del pueblo.
No tuvieron nunca luz eléctrica (si llegó a otros pueblos de la comarca pero pasó de largo por Claramunt).
En sus tierras de cultivo se sembraba cereal (trigo, avena, centeno), todo ello en poca cantidad, teniendo además viñas, olivos y almendros.
La ganadería se repartía entre las cabras y las ovejas.

Había dos fiestas en el pueblo: Sant Pere el 29 de junio y la Mare Deu de la Mercé el último fin de semana de septiembre. Acudían gentes de las masías y de los pueblos de alrededor.
Se hacia una misa, una comida con los familiares venidos de fuera en la que no solía faltar el arroz con pollo y conejo.
Por la tarde-noche era el turno del baile en el que algún año de más bonanza estuvo amenizado por una orquesta de Salas de Pallars, otros años también subía el acordeonista de Eroles.

"El último año que se celebró fiesta en el pueblo vino un acordeonista del pueblo de Castigaleu (Huesca). El gasto para la fiesta ya no daba para mucho. Ya había poca gente y se veía que Claramunt agonizaba". TONET GASET

El cura subía una vez al mes a oficiar misa desde El Puente de Montañana, había que bajar a buscarlo con una caballería y volverlo a llevar después al Puente.
El médico subía en caso de mucha necesidad desde Tremp.
El cartero subía dos veces por semana desde el pueblo de Figols de Tremp.
La maestra si vivía en Claramunt, aunque la planta de arriba de la escuela estaba destinada a vivienda no hacían uso de ella, se alojaban de patrona en alguna casa.

Tremp y Puente de Montañana siempre fueron sus salidas naturales. A Tremp se solía ir por asuntos administrativos y a Puente de Montañana para comprar alimentos y utensilios, a ambos tardaban entre dos horas y media y tres horas por viejos caminos que ya se perdieron por falta de uso.

"En los últimos años cuando alguien quería ir a Tremp bajaba andando los cinco kiómetros que hay hasta el cruce de la carretera para coger el coche de linea de la empresa Alsina que pasaba a las nueve de la mañana y que hacia el recorrido de Les a Tremp". TONET GASET.

La falta de servicios básicos como la luz y el agua, las malas comunicaciones que tenía el pueblo y las ganas de buscar otra alternativa de vida fueron el caldo de cultivo perfecto para propiciar el abandono de Claramunt. Hecho que aconteció en los años 60 y 70, emigrando principalmente a Tremp y a Barcelona.

"Yo tenía treinta y cinco años cuando se marchó la gente de Claramunt".
TONET GASET.


Tonet Gaset de Casa Pubill de 72 años y con la única compañía de un número considerable de perros, se encarga de que su pueblo no muera definitivamente mientras él pueda, pues se encarga de arreglar las calles, sube a los tejados a reparar las tejas dañadas y mantiene en buen estado las viviendas, pero la falta total de infraestructuras (sin agua ni luz) y una salud cada vez más precaria están haciendo mella en este símbolo de la resistencia frente al medio físico.

Visitas realizadas en septiembre de 1997 y en noviembre de 2009.

Informante: Tonet Gaset de Casa Pubill, el último de Claramunt. Memorable tarde pasada en su compañía, recorriendo todos los rincones del pueblo y hablando de un pasado que se fue.

Punto y aparte. En este año de 2009 que esta cercano a terminar es mi segunda visita a este solitario y lejano lugar de Claramunt perdido en los confines del Pallars Jussà.
Doce años han transcurrido desde aquella mañana otoñal de 1997 que llegué por primera vez hasta sus muros después de una hora de caminata desde el Coll de Montllobar.
Allí conocí por primera vez a Tonet Gaset, el robinsón de Claramunt. En aquella ocasión estaba conversando en la parte baja del pueblo junto al cementerio con una pareja de guardias del Seprona. Después de los saludos de rigor y de interesarse y extrañarse (los tres) de que un madrileño se aventurara a explorar estos parajes abruptos y poco frecuentados, hablamos de temas triviales, de Claramunt y de otros despoblados cercanos a Tremp. Ellos se van (los tres) hacia un terreno que desconozco (motivo parece ser de la visita de los agentes por allí).
Yo me encamino a visitar el corazón de este enriscado núcleo.
Allí quedé prendado de la singular y sencilla belleza de Claramunt, articulado en torno a una única calle y dos plazas.
Algo más de una hora después hago el camino de bajada y me voy alejando del pueblo en dirección a la carretera donde tengo estacionado el coche.
Tonet y sus acompañantes no aparecieron, ni me encontré con ningún vehículo en el trayecto.
En esta tarde otoñal de 2009 hago mi segunda visita a Claramunt.
Tenía la incertidumbre de si seguiría Tonet por allí pero un señor en Eroles me confirma que si, que por allí anda todavía el solitario de Claramunt.
Voy a buen paso porque tengo una hora de caminata y los días en esta época del año son cortos. El tiempo juega en mi contra.
La silueta lejana del pueblo en posición dominante sobre una colina me va acompañando en mí caminar, pensando en lo que vi en mi primera visita y expectante por ver como lo voy a encontrar ahora.
Son poco más de las cuatro de la tarde cuando llego hasta la última rampa de acceso que me adentrará en el trazado urbano de Claramunt. Casa Vilafranca, hermosa y altiva es la que da la bienvenida de acceso.
Una orquesta de ladridos ya se está haciendo oír, han advertido de mi presencia. Pero ningún perro sale a incordiarme o a saludarme. Parece que están todos encerrados.
Enseguida llego hasta su coqueta plaza. Todo igual, la escuela, casa Daniel, el horno...
Pero algo ha cambiado. Hay una verja de acceso a la segunda plaza donde están el resto de las casas y la iglesia.
El alboroto que forman los perros con sus ladridos va en aumento, pero no veo ningún ser humano. No estará Tonet? La puerta de su casa está entreabierta, sale y entra algún perro pero ni rastro de él.
Me asomo por detrás de la escuela, contemplo el precioso (pero arisco) paisaje de montes y barrancos, con alguna masía desperdigada. Dura la vida en estos solitarios parajes.
Vuelvo hacia la plaza, me asomo otra vez a la verja, los perros vuelven a ladrar con fuerza ante mi presencia y en estas ya si veo que se asoma Tonet por un balcón de su casa. Le hago una señal de saludo con la mano. Se mete para adentro y al cabo de unos segundos sale por la puerta de la calle. Se arrima a la verja. Le saludo nuevamente, le comento el motivo de mi estancia allí, le recuerdo de mi anterior visita y de como le conocí cuando estaba junto a unos agentes del Seprona. No se acuerda lógicamente de ese frugal contacto de años atrás, pero me abre la verja y me invita a pasar al recinto interior. La verja la ha puesto el ayuntamiento de Tremp para que tenga controlados a los perros, me explica. Me dice que no sabe el número exacto de animales que tiene pero que ha llegado a tener hasta sesenta. Cuando da a luz alguna perra me da pena deshacerme de los cachorros y los dejo con los demás, es su explicación ante el número tan considerable de canes que le hacen compañía.
Me invita a entrar al interior de la iglesia. Sencilla, pequeña. La pila bautismal, el coro, la pintura desgastada de las paredes, diversos objetos eclesiásticos de escaso valor sobre el altar mayor, figuras religiosas sobre peanas...
Me llama la atención que el suelo sobre el que pisamos es una alfombra de almendras, en gran cantidad a modo de tapete, todo el suelo cubierto. Iba recogiendo almendras estos años y como no tenía donde meterlas las eché aquí, me comenta.
El interior del templo sobrecoge y no puedo por menos de imaginarme el día de la Festa major con el pequeño espacio interior atestado de feligreses oyendo el sermón del mosén. Los amigos de lo ajeno se llevaron el retablo y un mueble donde había prendas sacerdotales un día que yo no estaba aquí, me dice con amargura.
Salimos al exterior, donde recibimos de nuevo la luz solar. Llegamos otra vez hasta la pequeña plaza donde está su casa. Le digo que me gustaría hacerme una fotografía con él para tenerla de recuerdo. Accede impasivo, ni le disgusta mi petición ni tampoco muestra entusiasmo. Lo toma como algo rutinario, como si formara parte del peaje de mi visita a Claramunt. Pongo la cámara fotográfica sobre una repisa y acciono el automático, me coloco junto a él, pero los perros inquietos y curiosos trepan sobre la repisa y empiezan a olisquear y a curiosear sobre la cámara de fotos y no conseguimos mi objetivo. Tonet se pone enérgico con los animales, les da unas voces y estos se retiran un poco. Por fin podemos "inmortalizar" el momento tan honroso y gratificante para mí de poderme hacer una foto con este hombre de cuerpo gastado, de rostro curtido y de serena y reposada presencia.
Salimos fuera de la verja, la cierra para que no salgan los perros y hacemos un pequeño recorrido por el pueblo. Me va mostrando rincones y explicándome detalles: aquí se ponía el músico en las fiestas, por allí se atajaba para subir al pueblo, menudos panadones se hacían en el horno...
El tiempo va pasando (muy deprisa cuando estas a gusto), el sol hace rato que se ocultó, la noche está al caer. Estamos en la parte baja, junto a casa Vilafranca, oteamos el horizonte, el camino de ida/venida al pueblo, la adustez del paisaje, la Conca de Tremp en la lejanía. Mi visita a Claramunt toca a su fin. Tonet me comenta que me va a pillar la noche de regreso hasta la carretera. Lo sé y no me importa, he pasado una tarde mágica con Tonet Gasset, el último de Claramunt, un "rara avis" en el siglo XXI, dando la espalda al confort y al bienestar, pero en concordancia con lo que él desea y como dice a modo de epílogo: tengo casa en Tremp pero este es mi pueblo y mi sitio está aquí mientras pueda.
Me despido de Tonet, le doy las gracias y le digo que he pasado una buena tarde en su compañía. Muy bien, es su escueta respuesta. Me desea buen retorno y que tenga cuidado en el camino con los imprevistos que me puedan surgir en la oscuridad de la noche que está encima.
Voy descendiendo por el camino, me voy alejando cada vez más de Claramunt, a pesar de la penumbra nocturna todavía alcanzo a distinguir la silueta alargada del pueblo en las alturas del terreno.
Allí alguien se estará calentando en la lumbre del hogar escuchando el transistor para ver lo que acontece en el exterior y recordando la compañía del forastero que ha venido hoy al pueblo y que le ha servido para salir un poco de la rutina.
Me alejo cada vez más con la sola iluminación que me aporta la luna que está en fase creciente (eso creo porque no soy un entendido en la materia). No me importa, el camino está bien marcado y es suficiente para llegar sin contratiempo hasta la carretera del Coll de Montllobar donde tengo el coche.


**En el año 2012 Tonet Gaset se marchó definitivamente de Claramunt bajando a vivir a Tremp**

PUBLICADO POR FAUSTINO CALDERÓN.

Claramunt en 1997.




Vista de Claramunt desde el Coll de Montllobar.




Vista de Claramunt desde la lejanía en su enriscada ubicación.



Torre de la iglesia y fachadas traseras de algunas viviendas.



Cementerio y vista parcial del pueblo, edificado sobre la roca.



Después de rodear el camino todo el pueblo ya se coge la rampa de subida, con la fachada trasera de Casa Vilafranca haciendo de muralla junto con la roca.



Entrada a Claramunt por su calle única, Casa Vilafranca en primer plano, donde se aprecia la cisterna que tenían algunas casas para canalizar el agua de lluvia del tejado debido a la escasez y la lejanía de la fuente.



Casa Vilafranca, de grandes dimensiones, era la más pudiente del pueblo y la penúltima en cerrar su puerta en Claramunt.



Ventanas de Casa Vilafranca y de frente Casa Sanuy, con un pintoresco reloj de sol en su fachada.



Escuela de Claramunt, a ella acudían también los niños de las masías cercanas. En la puerta está el buzón de correos.
"Cuando se cerró la escuela fue la puntilla para el pueblo puesto que las pocas familias que ya quedaban y que tenían algún hijo en edad escolar al tener que enviar a sus hijos a estudiar fuera prefirieron irse con ellos". TONET GASET.



Fachada trasera de la escuela.




Casa Daniel presidiendo la plaza, debajo del balcón es donde se situaba el acordeonista en las fiestas.



Otra pequeña plaza detrás de la anterior donde se sitúa el resto de viviendas: Casa Pubill tapada por la higuera de la que apenas se ve un balcón, Casa Parisi en el medio, que tiene la puerta cerrada y de frente La Rectoría, quedando a su derecha la entrada a la iglesia.



Casa Pubill, la única que permanece abierta en Claramunt.



La iglesia de Sant Pere, construida sobre la roca.




Pórtico de la iglesia.




Interior del templo. Altar mayor. Capillas laterales.



Horno comunal.

"Aparte del pan, las mujeres hacían unos brazos de gitano y unos exquisitos panadones (tortas rellenas de verdura) que estaban para chuparse los dedos". TONET GASET.



Por la misma calle de entrada hay que salir.




La maravillosa vista desde Claramunt con el sol ocultándose sobre la Conca de Tremp, además de observarse el camino que hay que andar para llegar al pueblo.



Masía de La Vileta, situada a unos dos kilómetros al sur de Claramunt.



Casa de La Vileta. Fue una masía poderosa en tiempos pasados. Tenía más de mil cabezas de ganado ovino.



Ermita de Santa Llúcia de La Vileta.




Interior de la ermita.

42 comentarios :

  1. Que sea la última vez que vienes a "pisarme" un despoblado a las puertas de mi casa...!habrase visto¡.Avisa hombre,que tomaremos una cerveza...Muy interesante la entrada.
    Un saludo.

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  2. La verdad es que el pueblo este tiene algo, no se pero algo que le da un atractivo especial, es un pueblo que me gustaría visitar y que me cayese la tarde noche en él, hablamos de esas tardes noches de invierno, de frio, es un pueblo atractivo. Estoy de acuerdo con Riviere la entrada que haces es buenísima. Me gustaría poder conocer a Tonet.

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  3. Extraordinario reportaje, ¡sí, señor!. Lamentablemente hay muchos Tonet repartidos por toda la geografía española (y curiosamente muchos de ellos rodeados de perros). Faustino, has hecho una buena labor de salvaguardar la memoria de este pueblo: los nombres de sus casas, las fiestas, los panadones... Enhorabuena.

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  4. Me encanta esta página,llevo dias mirando fotos , leyendo y estoy fascinada de como se expresa,es como si me oyera yo misma.Estos pueblos son impresionantes si pudieran hablar esas piedras....
    Admiración por el Señor Tonet que ante la adversidad ha sido capaz de ganar el pulso a la ciudad.
    Felicidades por estos reportajes.
    Glòria.

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  5. Me ha emocionado: es el pueblo donde nació mi madre. Gracias!

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    1. Es mi tío y te aseguro que su historia no tiene nada que invidiar mi la de mi familia, es una persona enferma. Seguramente tu madre conozca a la mía.

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    2. Si fantástico el reportaje pero yo soy su sobrina y vivo la otra cara de la realidad, la de la tristeza , la de de una realidad muy triste que si el reportero tuvo la oportunidad de poderlo entrevistar seguro que no pudo obviar? ...

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  6. Estupendo, sencillamente, perfecto, gracias por compartido.

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  7. dilluns vaig pujar a claramunt. per cap motiu en especial, només perquè ho indicava un cartell. era tard però quan vam arribar el dia ens va regalar una ESPECTACULAR posta de sol i unes vistes fora de sèrie. en silenci però acompanyada del fort vent que va començar a bufar no vaig poder frenar el somnriure gairebé etern de satisfacció que tot plegat em va produir.

    gracias por el texto y el trabajo de documentación. deduzco del post que las fotos fueron tomadas en el 2009. la realidad es que en estos dos años el pueblo se ha deteriorado mucho a la vista de cómo lo vi hace dos días.

    saludos.

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  8. Està molt bé l'explicació, el text, les fotos, realment està fet amb ganes, respecte i dóna molt de gust llegir-ho, gràcies per compartir-ho.

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  9. Precisament ahir vam ser-hi,a Claramunt.
    Quin silenci,quines vistes i quina impresió!
    Se'ns va fer de nit.
    Si que hi havia algu i vem veure i sentir uns gossos,però no ens vem atrevir a molestar.
    Quina llàstima que s'hagi deixat morir aquest poble,actualment està ruinós.

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  10. moltes gracies per aquest reportatge tant bo. a estat fantastic trasladarme amb el temps en un mont rural tant entranyable i tant dur al mateix temps! ja fa temps em vaig enamorar d'aquest poble.

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  11. Me alegre molt de saber que existeix un poble axi, amb un SEÑOR, quel cuida, per a que altres el pogam contemplaro.
    La enhorabona TONET, quant puga pasare a visitarlo, apart que mágraden estos pobles, tinc el cognom del poble, qui no diu que els meus avanpasats, foren de ahi.
    s. Claramunt de Valencia

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  12. Me gustaría saber el nombre y apellido de los habitantes de ese pueblo como así también de los maestros que pasaron por allí !!! Soy de Argentina y mis ancestros vivieron en una Masia cercana que se llamaba La Vileta !!! Los apellidos de mis familiares eran Lloret, Balagué, Mauri

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  13. Hermoso pueblo !!! Yo el año pasado estuve allí !!! Queda solamente una habitante !!! Mis tatarabuelos maternos eran de La vileta muy cerca de Claramunt !!! Mi tatarabuelo se llamaba Juan Lloret y mi tatarabuela Joaquina Balagué ... Mi bisabuelo fue maestro de niños en Eroles y se llamaba Jacinto Lloret y le decian el cinto de la vileta !!! Se caso con María Mauri de Castissen !!! Mi abuela se llamaba Juana Lloret Mauri y nacio en Eroles !!! Se caso con Buenaventura Berné Cabecerán de Isona en Tremp... En 1911 se vinieron a Argentina ...Me llamo Juan Alberto Ghiglione Berné y vivo en Argentina ... La familia Canelles de Tremp y Castissen son mis parientes como así también la familia de Salvador Senye Berné de Talarn !!! Actualmente estoy escribiendo un libro sobre la historia de la familia

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  14. CARLES. Visita 6-08-2014

    Desde 2012 sólo vive una mujer, nos explicó que no pensaba moverse del pueblo, ya que parece ser que el ayuntamiento de Tremp quiere disuadirla a que marche. Resulta que si se le unen más habitantes habría que urbanizar el pueblo. Y dicho ayuntamiento lquiere es cerrar Claramunt para siempre. Incluso hay alguna casa en venta.
    El Tonet ingresó en una residencia en el año 2012.
    Saludos.
    Faustino, mi pareja y yo también nos dedicamos a visitar pueblos deshabitados de toda España, de momento tenemos unas 7000 fotos y hemos estado en más de 200.

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    1. No sé si la mujer que comentas vive allí o es una que tiene ganado y va y viene todos los días, por lo menos es la que yo conocí.
      Ya me habían comentado lo de la marcha de Tonet a Tremp. La verdad es que no estaba ya para vivir allí en las condiciones tan precarias que lo hacía.
      Bueno Carles me alegra que tu y tu pareja también tengáis esta afición de visitar pueblos deshabitados. Doscientos visitados ya es una cifra respetable y como este hobby engancha y de que manera esa cifra irá en aumento sin lugar a dudas.
      Gracias por dejar tu comentario.
      Saludos.

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    2. Soy la sobrina de tonet . Mi tío no ingresó en ninguna residencia en el año 2012. Yo con mi familia subimos a visitarlo a su casa de Tremp en octubre antes de ser yo intervenida de una operación. La señora que vive allí es la señora que subía el ganado para que mi tío se lo cuidase cuando el aún podía estar en el pueblo en su casa, es decir , la casa de mis abuelos, y él mismo me comentó que lo hacía por ayudarla . En internet se dicen muchas cosas y la realidad solo la conoce mi tío y lo que sí que puedo asegurar por boca suya es que nunca nadie a querido ayudarle a mantener en pie el pueblo.

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  15. Pues nosotros estuvimos hace 2 veranos (Agosto-2014). Y lo que es deshabitado deshabitado pues va ser que no. No se si había una mujer, 2 o 30!. Lo que si habían eran perros. ¿Cuantos?. Pues no lo sabemos (No los vimos), la cuestión es que nos quedamos en la entrada del pueblo (En la rampa de subida). Los ladridos de los perros nos invitaron a dar media vuelta y salir por patas!. Fue una verdadera pena! Vaya tranquilidad (Exceptuando el ladrido de la manada de perros, claro está) y vaya vistas! Fue una pena irnos de aquella forma...una pena.

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  16. Ahora vive una mujer sola, que ni siquiera conoció "al home que tenia cien perros". Ha "okupado" una de las casas. No hay luz ni agua. Pero no quiere irse de allí por nada del mundo.Nos dijo que cada quince dias le traen "la compra" desde Tremp.No tiene miedo. Es amable y muy educada. Tiene dos perros y quiere tranquilidad y soledad. Creo que es muy feliz.

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  17. Lástima no haberlo sabido antes. Seguramente esta mujer no estaba hace 2 años y por los ladridos, nos pareció que allí habían más de 4 o 5 perros y con muy malas intenciones. La cuestión es que nos detuvimos en la rampa, bajamos del coche y estuve apunto de subir a pie. Pero lo vi bastante peligroso. Debo reconocer que en aquellos 15 o 20 minutos que estuvimos allí hasta que nos alejamos del pueblo lo pasamos bastante mal. Sobre todo yo que la idea fue mía de ir haberlo.

    No me extraña que la mujer que vive ahora no quiera irse! No tener agua ni luz tiene que ser muy duro y no digamos del frío en invierno pero vaya tranquilidad que se respiraba allí.

    La verdad que a veces visitar un pueblo abandonado puede llegar a ser peligroso. La seguridad que te da vivir en una ciudad o pueblo habitado se te va en décimas de segundo cuando visitas uno de estos. Sin cobertura, 5 kilómetros de baches y piedras, con perros salvajes y con gente desconocida se te pasan muchas cosas por la cabeza.

    Aun así mereció la pena!

    Fue toda una aventura que dió punto y final a nuestra vacaciones de aquel año

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  18. Hola,

    La mujer que vive en Claramunt desde hace 3 años se llama Ramona, hasta hace poco se ocupaba de la conservación de la iglesia y su claustro, así como de todo lo que podía. La iglesia es pre románica y esta en buen estado, mucho mejor que muchos de los pueblos abandonados que hay por la zona, pero el Ayuntamiento de Tremp a puesto una valla impidiendo el acceso a la calle que te lleva a la iglesia. Parece que tengan algún interés en que este pueblo no sea visitado y mucho menos habitado.

    Desde Claramunt puede verse otro pueblo que se llama Espills, éste se encuentra en una estado muy ruinoso, pero es de una gran belleza y os recomiendo que, si tenéis la oportunidad, lo visitéis. No tiene desperdicio. Desde Espills se ve Claramunt y viceversa, de seguro que aún hay caminos a pie de montaña que los unan. Los dos pueblos tiene una magia especial y no dejan al visitante indiferente.

    Faustino, muchas gracias por todo el trabajo aquí publicado, por contribuir en que aquellos recuerdos , historias, anécdotas,.. que sucedieron en estos lugares que ahora guardan silencio, de algún modo, no desaparezcan. Mi compañero y yo consultamos mucho tu web y nos emociona. Muchas gracias

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    1. La valla pienso yo que estará puesta no tanto para que no sea visitado el lugar sino para que los expoliadores y los vándalos no entren a saquear la iglesia.
      Bueno es saber que alguien se ocupa de que este precioso pueblo de Claramunt no languidezca definitivamente devorado por el abandono y el olvido.
      No hay que olvidar a Tonet Gasset, "el último guardian de Claramunt" que durante muchos años viviendo en solitario mantuvo las casas y las calles adecentadas y en buen estado hasta que su salud se lo impidió.
      Encomiable el trabajo de Tonet y de Ramona, porque la vida en este solitario lugar no es nada fácil.
      Por curiosidad ¿en que casa se ha instalado esta mujer?

      Si es verdad que las vistas desde allí son inmejorables. La ubicación del pueblo se presta a ello.

      Me alegra saber que sois sensibles al tema de la despoblación y que esta pagina os pueda servir de referencia.
      Elisenda, gracias por dejar tu comentario.

      Saludos.

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  19. Hola Faustino,

    Comentaba lo de la valla porque esta puesta de tal manera que impide el acceso a la calle que lleva a la segunda plaza del pueblo, que creo que es dónde vivía el señor Tonet Gasset. Tendría más sentido cerrar la iglesia para evitar el expolio de la misma y no toda la calle impidiendo la visita del pueblo. En fin, son temas que se me escapan y supongo que algún motivo habrá.. Por supuesto no he querido desmerecer toda la dedicación del señor Tonet Gasset y nos hubiera encantado poderlo conocer.

    Saludos

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    1. Creo recordar que cuando vivía Tonet había una especie de verja que impedía el acceso a la plaza donde él tenía su casa y estaba la iglesia. Porque recuerdo que me abrió una puerta para entrar a ese recinto, según me dijo para que no se le escaparan los perros.
      No se si será la misma valla o hablamos de otra distinta.
      Elisenda, gracias de nuevo por tus aclaraciones.
      Saludos.

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    2. Efectivamente la valla estaba para que los perros no se escaparan , muchos mordían . Algunos los tenía encerrados . Había más de cincuenta. A mí no me mordieron porque entre acompañada detrás de mi tío .

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  20. Hola a todos! Quería ante todo dar las gracias a Faustino por el reportaje y las fotos que hicieron que quería ir a visitarlo y a conocer más. Fuimos la semana pasada y hablamos con Ramona. No había rastro de perros, pero sí de una cabra. No sé si es donde duerme, pero hace servir el horno comunal para guardar algunos documentos con fotos y información del pueblo. Tiene en marcha una petición para restaurar/habilitar Claramunt,y en especial la iglesia. Han venido a hacer un reportaje 'los de la tele' nos dijo y buscando ahora lo encontré aquí;
    http://www.ccma.cat/tv3/alacarta/espai-terra/dilluns-2-de-maig/video/5598762/
    Nosotros firmamos y nos fuimos con un sabor agridulce. Primero por la decepción de la valla que impide ver el resto del pueblo. Y segundo por el sentimiento que su lucha está bastante perdida.
    Saludos Kristel

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  21. La valla está puesta a mala fe! Los del ayuntamiento de Tremp quieren impedir a toda costa lo que Ramona pretende, que es simplemente recuperar la iglesia y la historia del pueblo, peró el ayuntamiento de Tremp no lo pone fácil, solo son impedimientos.

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  22. Comentario de un tal LUIS.

    - La verdad que a veces visitar un pueblo abandonado puede llegar a ser peligroso. La seguridad que te da vivir en una ciudad o pueblo habitado se te va en décimas de segundo cuando visitas uno de estos. Sin cobertura, 5 kilómetros de baches y piedras, con perros salvajes y con gente desconocida se te pasan muchas cosas por la cabeza.-

    Que gracia, perros salvajes y gente desconocida, en las ciudades no ay gente salvaje?, para mi que tambien me dedico a visitar pueblos deshabitados, el peligro esta donde esta la gente. o sease, en las ciudades.
    y si con eso de gente desconocida, quieres decir que para ti pueden ser un peligro una persona que vive sola en un pueblo,, tu para esas personas también eres un desconocido, el peligro a lo mejor va contigo.

    A ver si somos un poco mas prudentes a la hora de hacer comentario.

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  23. Hay que felicitarte, Faustino, per tu blog. Comparto interés por los pueblos deshabitados. Me ha encantado descubrirlo y descubrirte.

    En febrero de 2017 estuve en Claramunt. Confirmo lo que ya se ha dicho sobre la famosa y frustrante valla, instalada por el Ayuntamiento de Tremp (junto a casa Daniel), oficialmente para evitar a los visitantes posibles accidentes por derrumbamiento de la iglesia, según Ramona, quien además se queja de que el Ayuntamiento no quiere que viva allí, ni ella ni nadie, para evitar hacerse cargo de un núcleo habitado más.

    Ramona, en mi visita, estaba ocupando el viejo horno. Me contó que hacía pocos días que, con el viento, se había desplomado entera la fachada de la escuela, cuyos recientes escombros, amontonados sobre la calle, acentuaban todavía más el aspecto de desolación.

    Ramona lucha por recuperar la iglesia y, aunque esta causa parezca perdida, pide apoyo y firmas a quien la visita. Sigue enamorada del pueblo, donde sobrevive, según dice, como si estuviera en la Edad Media. Lo hace con libros (agradece que quienes le visitan le traigan alguno) y con sus animales: un par de perros, algunos gatos y dos cabras, para quienes agradece galletas María. Así que ya lo sabe el visitante.

    Hoy, Claramunt es ella, Mañana, quién sabe, tal vez el olvido definitivo.

    Ramona soñaba entonces con una casita prefabricada, para cuya instalación contaba ya con el permiso del propietario de un solar cercano. Su curiosa personalidad se mezcla con un trato próximo, educado y afable.

    Casi un año más tarde, me gustaría saber si han habido novedades.

    Xavier

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    1. Hola.todo sigue igual...Ramona,Claramunt,los perros,las cabras. Fuimos hace una semana porque me llaman la atención los pueblos deshabitados.Mi intención fue grabar con el dron vistas del pueblo,y así lo hice acompañado amablemente de Ramona,que nos ponía al corriente de cual serian sus ilusiones.En breve pondré el enlace del vídeo a vista de dron para quien quiera disfrutar de las vistas espectaculares.Un saludo a todos.

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  24. muy buenas Faustino Calderón.A ver si te gusta y no te importa compartir el video a vista de dron de Claramunt.Un saludo y felicidades por tu trabajo.
    https://vimeo.com/252474186

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    1. Muchas gracias por el enlace. Ahí queda para todo el que quiera ver Claramunt a vista de pájaro.
      Me ha parecido espectacular la grabación. Otra manera totalmente diferente de ver el pueblo.
      Nos hace ver realmente su trazado y la ubicación tan espectacular donde se haya asentado.
      Lo veo más deteriorado a cuando yo lo visité, pero lógicamente son unos cuantos años y el tiempo no perdona.
      Un cordial saludo.

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  25. Hola. Buenas. Me encantaría visitar este pueblo. Alguien, por favor, podría indicarme cómo llegar de barcelona. No encuentro la ubicación. Gracias.

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  26. La madre de mi pareja es de Puente de Montaña y un dia de excursion sin rumbo, le diji a mi pareja quiero ir a ese pueblo a lo alto de la montaña, y fuimos. Lo Primero que nos encontramos fueron los ladridos de los perros y luego a Tonet sentado en una piedra apoyando la espalda a la paret.
    Nos presentamos, le dijimos que veniamos de Puente de Montañana, que mi suegra era de alli.Nos pregunto de que casa,(por esos pueblos se conocen por los nombres de las casas) Le dijimos Casa Besso, se puso muy contento, habia conocido al Abuelo y al Tio de mi pareja(Baltasar y Sisquet) eran los Matarifes de la Comarca, fue una tarde maravillosa, mi pareja conocio caracteristicas de su Abuelo al que no conocio, nos comento que subian con una Mula en epoca de Matanza, normalmente la forma de pago era el trueque(intercambiar una cosa por otra), fue genial.
    Tambien nos enseño la Iglesia y es verdad, el suelo era una Alfombra de Almendras, nos dijo que las tenia ahi porque le pagaban muy poco por ellas.
    Un gran hombre Tonet,con su aspecto desaliñado, pero el era feliz en su Pueblo, nos comento que bajaba a Tremp con su Tractor a comprar provisiones y que los Servicios Sociales querian ingresarlo en una Residencia y aunque tenia su casa en Tremp, el era feliz alli.
    Llego la hora de despedirnos y nos dio recuerdos para el Tio Sisquet.

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  27. Gracias Faustino por este maravilloso bloc, al leerlo me has hecho recordar una tarde genial en Claramunt, con un ser muy especial Tonet

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    1. Fantástico comentario el que has escrito recordando una tarde memorable con un personaje entrañable en un pueblo mágico.
      Tanto a vosotros como a mí os dejó huella Tonet y tuvo un trato de lo más exquisito.
      Son encuentros que le enriquecen a uno la mente, por lo que uno disfruta, aprende y admira de personas que han dado la espalda al progreso.
      Los años no perdonan y Tonet por desgracia para él tuvo que bajarse a Tremp pero según me cuentan añorando mucho su querido Claramunt.
      Gracias por dejar tu bonito comentario.
      Un cordial saludo.

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  28. Es una gran pena que todo esto se pierda.
    Seria mi gran deseo poder visitar todas estas localidades olvidadas q merecen todo el respecto.
    Me gustaria visitar Toda aquella zona y sus pueblos solitarios.

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  29. Buenas tardes.
    Ayer estuve en Claramunt.
    No queda absolutamente nadie. Solo silencio, ruinas y una calma fascinante.
    No hay perros, ni Tonet, ni Ramona, ni nadie.
    Encontré a una pastora en Fígols con la que estuve hablando. No me dijo que se llamase Ramona. Pero si me dijo que habia estado pasando los inviernos en Claramunt con su ganado y viviendo en una caravana.
    También me manifestó que este último invierno no subió porque los del Ayuntamiento de Tremp le habían cortado el agua de una fuente que estaba por el lugar...
    En fin, testimonios que uno va encontrando.
    Lo que si que puedo asegurar es que el pueblo está en estado muy ruinoso y que no queda absolutamente allí arriba viviendo.

    Un saludo a todas y a todos.

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  30. Vaig ser a Claramunt fa dues setmanes. Només s'aguanta l'esglèsia, el campanar i la casa d'en Tonet que poc li queda per caure.
    M'ho va fer conéixer a la Montse, la cabrera de Fígols que ha pujat anys a Claramunt amb les cabres i les tancava al corral que hi ha en una casa apartada. Em va dir que en Tonet l'havia construït quan el que feia servir al poble es va cremar i es va ensorrar. En Tonet ara és en una residència a Tremp. De la Ramona no me'n va parlar. Jo tampoc sabia que existia fins llegir aquest bloc. Jo també tinc cabres i per això em vaig interessar pel tema. La Montse em va insistir en que a Clararamunt estarien molt bé. Buscant informació del poble he arribat a trobar-vos i ho he trobat molt interessant.
    Salutacions a tothom!

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  31. Muchas gracias por el reportaje.

    Hace un par de años que tengo una casa que estamos restaurando en Eroles. Como me gusta mucho la montaña (por eso me compré la casa lugar) hice el domingo una excursión de 1h 30' hasta Claramunt.

    Me crucé con un rebaño de cabras en la pista de subida al pueblo, pero ni rastro de pastor. En el collado, a la izquierda había una granja en ruinas, pero parecía que era el refugio del rebaño (por la cantidad de excrementos). Hacia mucho viento.

    En el pueblo solo está en estado "decente" Casa Vilafranca. El resto todo ruinas, piedras de las paredes por el camino que lleva a la iglesia. No había ninguna valla, pude llegar hasta la pequeña plaza donde supongo que vivía Tonet.

    Había mucha calma y tranquilidad. No me extraña que pese a las incomodidades obvias por la ausencia de servicios básicos , se resistan a abandonar tan precioso lugar.

    Saludos

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  32. Este otoño he estado en Claramunt y, por desgracia, está, excepto la iglésia, en peor estado. Ya no sube nadie. De hecho despues de Tonet hubo una mujer que intentó recuperar el pueblo, arreglando sobre todo la iglesia. Este fin de semana publicaré la entrada. Me fascinó la vista de Espills, otro pueblo abandonado.

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